EL AUDAZ TERCER MOSQUETERO
(Artículo publicado en el diario Europa
Sur el 21 de noviembre de 2003)
El escritor,
poeta y ensayista gaditano, Rafael de Cózar Sievert es el tercer
mosquetero de un triángulo de brillantes plumas literarias, cuyos
otros dos vértices cierran Juan Eslava Galán y el propio Reverte.
La trayectoria investigadora y académica de Fito Cózar [es
profesor titular de Literatura Española en la Universidad de Sevilla]
prevalece sobre su obra propia y encubre una mente magistral para toda clase
de maquinaciones.
Gracias a sus buenos oficios "El caballero del jubón amarillo" se presenta oficialmente hoy en Jerez, tras serlo en Madrid y Barcelona y antes que en otras grandes urbes.
Reverte y los excelentes dibujos a plumilla de Joan Mundet retratan en esta obra el porte de explorador decimonónico de Fito. Su erudición y sentido del humor han sido diluidos en favor del personaje asignado, pues Cózar posee una amenidad que le hace el alma de cualquier reunión. Es fácil seguir su alegre rastro en toda suerte de conventículo. Un espíritu osado y burlón que a veces logra hitos increíbles. Hace un par de años, durante un sofisticado sarao en Sevilla, Fito confabuló a una partida de damiselas para despojar de sus joyas a otra de las invitadas, cuya ostentación vulneraba el más elemental decoro. Invocando a lo más granado del bandolerismo épico, desde Robin Hood al Tempranillo, pasando por Dick Turpin; Fito y su partida culminaron el expolio y la rapiña fue cedida a una ONG. El incierto origen del tesoro y la inmunidad diplomática - gozada por varias de las cuadrilleras- silenciaron el asunto, cuyas secuelas si generaron un agrio intercambio de notas verbales de repulsa entre varios países europeos.
Gracias a sus buenos oficios "El caballero del jubón amarillo" se presenta oficialmente hoy en Jerez, tras serlo en Madrid y Barcelona y antes que en otras grandes urbes.
Reverte y los excelentes dibujos a plumilla de Joan Mundet retratan en esta obra el porte de explorador decimonónico de Fito. Su erudición y sentido del humor han sido diluidos en favor del personaje asignado, pues Cózar posee una amenidad que le hace el alma de cualquier reunión. Es fácil seguir su alegre rastro en toda suerte de conventículo. Un espíritu osado y burlón que a veces logra hitos increíbles. Hace un par de años, durante un sofisticado sarao en Sevilla, Fito confabuló a una partida de damiselas para despojar de sus joyas a otra de las invitadas, cuya ostentación vulneraba el más elemental decoro. Invocando a lo más granado del bandolerismo épico, desde Robin Hood al Tempranillo, pasando por Dick Turpin; Fito y su partida culminaron el expolio y la rapiña fue cedida a una ONG. El incierto origen del tesoro y la inmunidad diplomática - gozada por varias de las cuadrilleras- silenciaron el asunto, cuyas secuelas si generaron un agrio intercambio de notas verbales de repulsa entre varios países europeos.
OSCAR LOBATO
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