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LOS «MOMENTAZOS» DEL CARA A CARA HISTÓRICO ENTRE FERRER-DALMAU Y PÉREZ-REVERTE
Desde la primera pregunta del acto «¿Pintar batallas es de fachas?», hasta el comentario del artista sobre Agustina de Aragón
MANUEL P. VILLATORO - ABC_Historia / CÉSAR CERVERA - C_Cervera_M
Pintar el sufrimiento
En la obra de Ferrer-Dalmau no se omite el lado menos lustroso y perfumado de la contienda. La guerra es sangre, muerte y miedo. Esa vertiente de la batalla también está presente en los cuadros del catalán. Entre la serie de piezas sobre la Guerra de Independencia se incluye un lienzo sobre el sufrimiento de los héroes de la batalla de Bailén en una enfermería improvisada. «Hay que pintar también el sufrimiento», insistió ayer el pintor.
Cervantes militar
Coincidiendo con la celebración de los 400 años de la muerte de Cervantes, Dalmau puso rostro al joven de Alcalá de Henares en medio de la batalla de Lepanto. «Estaba harto de tanto Shakespeare, quería ponerle cara al Cervantes militar», recordó.
Un escenario óptimo
El Auditorio 400 ofreció a los asistentes y a los protagonistas el escenario perfecto para una conversación entre amigos y apasionados a la historia. La enorme pantalla de la sala permitió ver en toda su magnitud la selección de sus mejores cuadros.
Sin ideología
El cuadro de unos carlistas mirando nostálgicos hacia el horizonte, al más puro estilo de una película de John Ford, sirvió a Pérez-Reverte para interrogar a su amigo: «¿Pintar historia es de fachas?». «No, dar vida a una contienda jamás debería tener ideología», sintetizó Dalmau sobre un error persistente en España.
Conversación entre amigos
En la charla también hubo tiempo para algunas confesiones. El pintor y el escritor son amigos desde hace diez años y saben del precio que tiene el trabajo creativo. El matrimonio es algo que Ferrer-Dalmau descuidó por su obra, pasando cada día jornadas maratonianas en su estudio madrileño.
Las mujeres guerreras
La historia de España está repleta de mujeres de armas tomar. Personajes que, como Agustina de Aragón o María Pita, dieron un paso al frente cuando todo se venía abajo. También en la obra y en la mente de Ferrer-Dalmau son algo más que testigos mudos. Así lo demuestra el lienzo que realizó, en 2012, sobre la joven Agustina plantando cara a los franceses. «Ellas aguantan mucho mejor el dolor que nosotros. Son increíbles», añadió Pérez-Reverte.
Lo bueno y lo malo de la historia
El escritor y el pintor comparten en su obra, novelas y pinturas, el empeño de mostrar lo mejor tanto como lo peor de la historia. El hecho tal y como fue. «La marcha a Tenochtitlán» muestra a los indios colaborando con los españoles en su marcha hacia la capital azteca. Esos detalles dan verosimilitud a sus cuadros.
El creciente interés por la historia de España
El auditorio 400 del Museo Reina Sofía se llenó hasta la última butaca con personas de todas las edades. La historia desde una visión contemporánea y desacomplejada interesa al público más que nunca.
Cataluña en el corazón
Como catalán, el pintor de batallas se siente herido frente a los intentos de diluir la notable aportación de Cataluña en la historia española. «Hasta hace poco los vascos y catalanes eran los más españoles. Mis cuadros tratan de recordarlo».
Ferrer-Dalmau, a Pérez-Reverte: «Me irrita que se olvide que los catalanes hemos combatido siempre por España»
Más de 400 personas han asistido a la conversación sobre historia y pintura, organizada por ABC, entre el pintor de batallas y el escritor
MANUEL P. VILLATORO - ABC_Historia / CÉSAR CERVERA - C_Cervera_M
La historia militar de España a través de los cuadros del más ilustre pintor de batallas: Augusto Ferrer-Dalmau. Eso es lo que transmitió el encuentro que se celebró ayer entre este artista catalán y el escritor y académico Arturo Pérez-Reverte en el Museo Reina Sofía. Un acto organizado por ABC y la Fundación Mutua Madrileña en el que, además, se habló sobre la doble visión de una tierra (la nuestra) aguerrida en la victoria y en la derrota. No en vano Napoleón llegó a decir de ella que sus gentes habían actuado como un único hombre de honor para expulsarle del país (un hecho que el artista comentó en la sala frente a su lienzo de la contienda San Marcial); y al Duque de Enghien le costó sangre y balas doblegar al último Tercio de Rocroi.
Con la mítica carga de los jinetes de Zumalacárregui, uno de los múltiples cuadros de Ferrer-Dalmau sobre el carlismo, comenzó un evento en el que un público de todas las edades abarrotó la sala y al que asistieron personalidades de la cultura y la política. Todos ellos comenzaron escuchando las palabras del director de ABC, Bieito Rubido, quien durante la presentación del acto remarcó que «vivimos en una nación singular, antigua y baqueteada en mil batallas. Acostumbrada a mover sus horizontes y aventurarse por doquier».
Tierra de batallas
La pregunta con la que Pérez-Reverte arrancó la conversación fue como él: algo irreverente, pero concisa y directa a un tema más que controvertido. «¿Pintar batallas es de fachas?». Tras una carcajada general, Ferrer-Dalmau se limitó a señalar que dar vida a una contienda jamás debería tener ideología. Quizá por eso uno de los primeros lienzos sobre los que también charlaron fue el que muestra al general Prim (catalán y español) junto a sus soldados en la batalla de Wad-Ras. Un cuadro, en palabras de su autor, reivindicativo: «Los catalanes estuvieron en esta guerra con una bandera española atada a la cintura. Me irrita que se olvide que los catalanes hemos estado en todas las contiendas luchando por España».
A partir de ese punto comenzó un repaso por los lienzos más famosos del pintor. Cuadros «realistas, pero no hiperrealistas», según sus propias palabras, que buscan «dar vida a algo que no se puede fotografiar»: escenas de batallas muchas veces olvidadas, pero en las que los soldados combatieron con España en el corazón y en el sable. O en el fusil G36, como es el caso de «La patrulla», que muestra a unos soldados españoles en Afganistán. «Fui allí con la mente y los ojos en guardia y di con un escenario dantesco donde un puñado de españoles se jugaban la vida, y eso es lo que pinté, que es también un homenaje a los más de cien muertos españoles», añadió Ferrer-Dalmau.
La pintura naval es lo que más le ha costado a lo largo de su carrera, siendo «El Glorioso» el primer acercamiento a esta temática extremadamente técnica. «Ya sé distinguir una cuerda de un cabo, pero es un estilo que me ha hecho sufrir», bromeó el pintor. El máximo culpable de que se iniciara en este mundo es el propio Pérez-Reverte: «Tu eres un pintor de tierra, no entendías los vientos del mar entonces».
Entre sus obras más apreciadas se encuentra el Milagro de Empel, donde un grupo de soldados de los Tercios encontró una imagen de la Virgen de la Inmaculada enterrada en el barro. «Para mí es uno de los mejores cuadros que he pintado. Estoy orgulloso», reconoció.
«Los Tercios te ponen mucho ¿no? Te entiendo. Es realmente increíble lo que hicieron todos esos morenos de pequeña estatura que tenían agarrado a toda Europa por el pescuezo», añadió el escritor.
El paseo por la obra del pintor catalán terminó, como no podía ser de otra forma, con la primera asociación entre ambos amigos: la batalla de Rocroi, sobre la honrosa derrota que sufrieron los tercios en 1643. «Es un cuadro donde las expresiones dan mucho miedo. Viendo la cara de estos hombres se entiende la fama de esta infantería», explicó Pérez-Reverte. Así, en 2011, el catalán se dio a conocer con esta obra más allá de los círculos de aficionados a la historia. La estampa de un grupo de soldados españoles sufriendo, una tras otra, las cargas de los franceses fue su tarjeta de presentación al gran público. El cuadro, además, cuenta con el rostro de varios personajes familiares para los seguidores de la saga del Capitán Alatriste.
«La crueldad y el heroísmo están presentes en la misma cantidad en esta representación de la batalla», señaló el pintor que, junto al escritor, midieron cada detalle de la obra, incluido el perro de la primera fila o el mozo de tambor rubio, muestra de la huella española en Flandes. Sus cuadros, de hecho, se destacan por la buena documentación histórica.
La de ayer se convirtió así en una tarde para sentarse al calor de la Historia a disfrutar guiados por las palabras de dos maestros. Uno, que dibuja imágenes con palabras. Otro, que les da vida sobre un lienzo.
http://www.abc.es/cultura/abci-ferrer-dalmau-frente-arturo-perez-reverte-abc-homenajea-mejor-pintor-batallas-espanol-201701231851_noticia.html
Streaming Sigue el cara a cara entre Pérez-Reverte y Ferrer Dalmau en ABC.es el 2 de febrero a las 19.00
FERRER-DAMAU FRENTE A PÉREZ-REVERTE: EL ACADÉMICO ENTREVISTA AL MEJOR PINTOR DE BATALLAS ESPAÑOL
El próximo 2 de febrero a las 19.00 horas, el diario ABC apadrinará una conversación entre el pintor y el escritor en la sala Auditorio 400 del Museo Reina Sofía presentada por su director, Bieito Rubido
CÉSAR CERVERA - C_Cervera_M
23/01/2017 18:51h - Actualizado: 23/01/2017 19:27h.
El pintor Augusto Ferrer-Dalmau y el escritor Arturo Pérez-Reverte comparten desde hace diez años una amistad franca, la fascinación por la historia de la guerra, el coleccionismo de sables militares y, dentro de una semana, sumarán a esta fructífera asociación una conversación que organiza ABC en torno a la obra del mejor pintor español de batallas de nuestro tiempo. El próximo 2 de febrero a las 19.00 horas, el diario ABC y la Fundación Mutua Madrileña apadrinarán una conversación entre el pintor y el escritor en la sala Auditorio 400 del Museo Reina Sofía presentada por su director, Bieito Rubido, y que estará abierta al público hasta completar aforo.
«Para mí es un homenaje muy importante y el reconocimiento a tantos años y horas de trabajo sin parar y noches sin dormir. Es un momento muy emocionante en mi carrera», asegura Ferrer-Dalmau, que nos recibe en su estudio madrileño donde ultima una nueva pintura dedicada a la cooperación naval entre el Imperio español y las 13 Colonias durante la Guerra de Independencia americana. Desde que su amigo Pérez-Reverte le retara a lanzarse a la pintura naval con la odisea de El «Glorioso» parece haber cogido carrerilla. «Me he tirado muchas horas sufriendo con estos cuadros. Son los que más me cuestan, porque te hacen jugar con retos técnicos tan complejos como las mareas y los vientos».
De las conversaciones entre ambos amigos surgió también el cuadro «Rocroi, el último tercio» (2011), una composición pictórica que puso rostro a los soldados veteranos (entre ellos uno en segundo plano con el mismo rostro del escritor) que vendieron cara su derrota frente a los franceses en 1643. «Fue nuestro primera asociación; y desde entonces él siempre pone alguna pincelada o me sugiere algún detalle en los cuadros importantes», explica el pintor de batallas.
Aquella obra hizo público lo que era un secreto a voces en los círculos de aficionados a la historia militar: el enorme talento del pintor catalán afincado en Madrid. «Es nuestro mejor pintor de batallas desde el siglo XIX. Nadie había pintado con tanto talento y tanta hermosa eficacia la historia de España», apunta Arturo Pérez-Reverte.
El inesperado resurgir de la pintura militar
Nacido en Barcelona, Augusto Ferrer-Dalmau empezó su carrera con la pintura paisajista y saltó más tarde a una temática que resultaba inédita desde hace décadas en España. «Cuando yo empecé la pintura militar era un elemento raro, pero en un tipo de galería del mundo del coleccionismo tuvo buena aceptación y se corrió la voz. La gente quería tener una ventana a la historia de su país», afirma el pintor cuyo estilo realista se nutre de una buena documentación y asesoramiento.
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El cuadro «Por España y por el Rey, Gálvez en América»
Entre sus obras se encuentran cuadros de soldados de los Tercios de Flandes, conquistadores españoles en América, voluntarios de la División Azul, escenas de batallas navales y personajes tan emblemáticos como Agustina de Aragón o Miguel de Cervantes, entre incontables representaciones de la historia de España. No en vano, el pintor español también ha visto desde cerca la zona de operaciones de conflictos actuales como el de Afganistán o el Líbano, haciendo bocetos, tomando apuntes y pintando sobre los instantes de la guerra moderna. Para ello no dudó en convivir con las tropas españolas de la ISAF, en 2012, y en la provincia de Helmand con las Fuerzas Armadas de Georgia años después. En mayo de 2016 pintó a las tropas españolas en la misión del Líbano, como fue narrando él mismo en un blog de ABC.
Batalla de Rocroi (1643) por Augusto Ferrer-Dalmau
http://www.abc.es/cultura/abci-ferrer-dalmau-frente-arturo-perez-reverte-abc-homenajea-mejor-pintor-batallas-espanol-201701231851_noticia.html?ns_campaign=gs_ms&ns_mchannel=abc_es&ns_source=tw&ns_fee=0&ns_linkname=cm_general |