Pues en buena hora se me ocurrió mentar a raíz de la publicación en internet del Oro de Rey a los habitantes del foro de Corso.
Verán, en este reducto de piratas, que consiguieron calentarme el corazón poniendo a disposición de todo aquel que lo solicitase el libro por el morro, y que siguen mis pasos con tenacidad y métodos propios de la antigua KGB, un tal Filemón, ¡de la TIA tenía que ser!, ha tenido la brillante idea de promover un concurso, en el que el objeto es participar con un artículo escrito a la manera del firmante, que es una como otra cualquiera, pero que es la mía. Informado de lo que había y picado por la curiosidad, decidí darme una vuelta por el susodicho y la verdad, hubiera sido mejor no hacerlo.
Resulta que no solo la participicación es masiva, sino que me temo que, ahora que está de moda, han conseguido una máquina de clonar y me he visto rodeado de artículos que ya no se si los he escrito yo, si son apócrifos o si los hemos escrito a medias.
Para mas inri, dos o tres temas que tenía in mente para próximas columnas han sido inmisericorde y brillantemente machacados por los participantes, lo que me obliga a exprimirme el cerebro en busca de nuevos temas.La guinda del pastel la pone la participación de miembros del foro de mi vecino el Rey de Redonda, que sin ningún complejo y con un desparpajo a prueba de balas, han decidido colaborar y con éxito. Y por ahí no paso , vale que mis incondicionales me pisen las ideas, vale que me provoquen una crisis de identidad, pero a Reverte lo que es de Reverte y a Marias lo que es de Marias, o sea que ya le estáis dando las suyas al vecino que las del pulpo me las estoy llevando yo.
Por último, espero que esto no llegue a oídos de los editores del Semanal, que la tentación conviene mantenerla alejada salvo cuando estás decidido a caer en ella. En fin , que muchas gracias por vuestro interés y vuestro esfuerzo.
Cabrones.
