“Pérez-Reverte
dice que la guillotina francesa nos hubiera librado de la ignorancia” |
Lunes, 14 de enero de 2008
EFE - Bilbao
El escritor Arturo Pérez Reverte ha asegurado hoy que "una buena guillotina por la que hubieran pasado reyes, curas y generales, nos hubiera librado de la España negra, la ignorancia y el fanatismo" ya que, en su opinión "el 2 de Mayo, este país cerró la puerta a la modernidad" que venía de Francia.
En la presentación en Bilbao de su último libro "Un día de cólera", el autor ha lamentado que "se haya vendido" aquella sublevación "desde el concepto de patria rancio" en que toda España se enfrentó contra el Ejercito invasor de Napoleón cuando, sin embargo, "fueron cuatro y de las clases más bajas, quienes en una especie de intifada, en una lucha callejera" se levantaron "en un acto de furia" contra los franceses.
En su opinión, "aquel día, España cerró la puerta a la modernidad y al aire fresco" que venía de Francia y posteriormente, con la Guerra de la Independencia este país se puso sobre sí mismo "una losa" que "le enterraría con la Iglesia de la Inquisición, los monarcas incapaces y corruptos, y la ignorancia".
Así, ha expresado "admiración por la gente que es valiente aunque no tenga razón y desprecio hacia los cobardes, aunque la tengan", ya que aquel alzamiento supuso "una tragedia de los intelectuales" que anhelaban las idea de libertad que representaba la República Francesa, pero veían cómo morían sus compatriotas por las calles y a los invasores saqueando su país.
Ha puesto a Goya como ejemplo de "los lúcidos" que "sabían que el francés tenía razón en lo ideológico pero no en lo visceral, y que tuvieron que optar con quién combatir". En los cuadros de Goya "no hay buenos ni malos, porque tan crueles y salvajes pinta a los franceses como a los españoles", ha descrito.
El mismo Pérez Reverte ha confesado que no hubiera sabido a qué bando unirse porque "el impulso de aquella guerra fue noble, el resultado fue vil" y "nos dejó incapaces" para afrontar el desarrollo del país.
El 2 de Mayo "se definieron los comportamientos de la España liberal y la reaccionaria, que comenzaron separarse" y así, ese día, España firmó su sentencia de oscurantismo que todavía estamos pagando", según ha dicho.
Sin embargo, ha imaginado Pérez-Reverte, "una buena guillotina en la Plaza Mayor de Madrid por la que hubieran pasado reyes, obispos y generales, había cambiado mucho el panorama del país".
Ha explicado que escogió ese tema para su novela para, en base a los escritos y documentos históricos, relatar lo que ocurrió aquel día "siendo completamente objetivo", ya que entre las próximas elecciones generales de marzo y el próximo 2 de mayo, cuando se cumple el bicentenario del alzamiento, "vamos a vivir mucho ruido mediático y político" en torno a esa fecha.
Por ello, "he querido poner a disposición del lector hechos concretos y documentos históricos, para devolver el protagonismo de ese día a la gente más humilde de Madrid que se levantó contra los franceses" y así, confeccionar "una novela, pero de tipo documental o como un reportaje".